Cocinando [Damon S. ]

Había salido de la casa, aun estaba lloviendo, y las palabras de Stefan aun revotaban en mi cabeza, esque realmente era extraño pensar o volver a recordar que Stefan, sin estar ebrio y cosa que él nohacía, me había dicho que cuidara de Elena y si esque no había entendido mal, ella iba a terminar como un premio si era si me besaba como ella besaba a Stefan, realmente su propuesta era algo difícil, pero vale la pena intentar o no?.

Caminando por las calles de Mystic Falls y sin haberme dado cuenta había terminado cerca de la casa de Elena y porque no? porque no empezar a protegerla desde ahora o intentar que sea mía o yo que sé.

Parado ya frente a la puerta de la casa de Elena, solo pude escuchar un coracón por lo que deduje que Elena estaba sola y de porque estaba tan seguro que aquel corazón sería de ella, era porque ya me había acostumbrado a su forma de latir y porque no decirlo ya me había costumbrado a todo de ella.

Toqué el timbré y esperé a que me abriera la puerta.

Tendría decir que me había puesto en alerta al escuchar el timbre de la casa. No estaba planeado recibir alguna visita, por lo que no creía que quien vendría sería una "visita". Palpeé en mi cuello buscando mi collar y solté un suspiro al darme cuenta de que aún lo tenía puesto, ya que la verbena me protegería de cualquier vampiro extraño que intentase entrar.

Abrí la puerta y me encontré con un par de ojos azules y oscuros como la noche, reconociéndolos al instante abrí de todo la puerta-Damon-dije mirándole. -Hum...no esperaba verte por aqui-comenté alzandome de hombros-¿Quieres entrar?-sí, estaba invitándolo a entrar por alguna extraña razón.

Abrío la puerta y no evité mostrar una sonrisa al ver los ojos marrones de Elena y aquellos labios finos de los que me había fijado antes, mucho antes.

Sonreí al verle o mejor dicho lo hise cuando abrió del todo - espero no ser ... una molestia - dije ladeando la cabeza mientras entraba a su casa, había sido re-invitado en la casa de los Gilbert - mm gracias - dije mirándole sorprendido - se ve que no me esperabas... - comenté mientras entraba a aquella pequeña entrada que se ubicaba y depues estaban las escaleras, las miré un rato y después volteé para mirarla - que hacías? haces? es lo mismo - pregunté curioso mirándole con una sonrisa en el rostro.

Rodeé los ojos sin que el me viese, mientras cerraba la puerta en cuanto el entró. Ya no podía hacer nada, por que de todas formas hubiese entrado. El ya había sido invitado a entrar antes y no podía revertir eso. Le miré y le señalé la cocina, caminando hacia ella y empezando a buscar aquellos ingredientes para la lasagna.

Me volteé suavemente mirándole-Pues...como verás, a punto de hacer la cena-dije observándole fijamente-Y...si quieres quedarte por estos lares...tendrás que colaborar-dije, dejándole un pequeño libro de recetas. Al menos sirviría de algo, claro.

Le seguí con la mirada y noté como señaló la cocina, estaba cocinando, no puedo negar que esta no fuera buena cocinera y a decir verdad era una muy buena.

En la cocina esta empezó a sacar un tanto de cosas y a mi dejandome con un pequeño libro - cocinar? no sé si tú ... pero yo no me considero un buen cocinero - dije con una sonrisa mirando el libro - que cocinarás? - le miré un tanto para que luego de que me lo diga empezar a buscar la receta - colaboraré ... no quiero ser un "bulto" - dije rodeando los ojos, pero luego de esto me fijé en su cuello, llevaba el collar de verbena que Stefan le había dado, sabía guardar los regalos, pero tampoco se lo iba a quitar... esa era una de las estupidas condiciones que Stefan me había propuesto.

-Pues...siempre hay una primera vez no? Cocinar no es tán dificil-dije con una pequeña sonrisa volviéndome a los ingredientes de la lasagna. Coloqué todo en orden en un bowl y luego me volteé a ver a Damon-¿Me pasas el queso?-le pregunté señalando la refrigerado. El no podría simplemente quedarse quieto y observar, si había venido, tendría que ayudarme con algo.

Por alguna buena razón, había heredado las artes culinarias en la cocina de parte de mi padre, aunque la ultima vez que había hecho una lasagna con Jeremy...esta terminó quemada.

Empecé a caminar por el lugar viendo en que podía ayudarle, al parecer Elena estaba haciendo lasagna - lasagna... aqui esta - dije mientras detenía las ojas con mi dedo indice - pero parecer que ya has hecho antes - dije mientras me acomodaba un tanto a su lado, pero para eso me pidió que le pasara el queso, se lo pasé rápidamente con una sonrisa, pero antes de que un de nada saliera de su boca, o bueno si quisiera decirlo me limité a decirlo yo, en son de broma - de nada (?) - dije con una sonrisa mientras me volvía a su lado.

Rodeé los ojos-Sí, la he hecho antes vale? Pero no tengo una supermemoria como para recordar cada paso de cada comida que hecho-dije, con la mera intencion de poner a prueba cúanto soportaba mi lado seco y frívolo. Cuando me pasó el queso, lo tomé y me dispuese a colocarlo como una capa sobre la lasagna, en medio y arriba. -Ahora ya entiendo por qué Stefan es experto cocinando-dije alzándome de hombros, solo para joderle. ¿Alguno de los dos hermanos tendría que cocinar no?

Elena se comportaba de manera hostil, así que frncía el ceño y la boca cada vez que terminara de hablar- Ah, okay, tampoco te culpo ... - dije tratando de ser un tanto agradable con ella, quería obtener lo de la apuesta, pero tambien Elena sabía que si se llegaba a comportar mal, no me controlaría del todo.

Trataba de estar a su lado para poder ayudarle, pero se me era un tanto difícil porque al parecer a Elena no le gustaba que le ayudace, se hacía difícil la cosa - ... sí, supongo que lo es - dije con una sonrisa fingida, había probado pocas veces su comida.

Damon había transformado a una de mis mejores amigas, Meredith. Era como haberla matado, pero con su sangre en el interior y ahora corriendo por sus venas... ¿Cómo queria que le tratase, entonces? El me había hecho ya bastantes cosas...aunque no le culpaba por nada, aún me encontraba resentida. Terminé de preparar la lasagna y metí el pirex al horno, colocando la hora y todo eso exactas.

Me di una vuelta, para observarle y caminé al frigorífico con la gran cantidad de harina que me había quedado. Sin querer me tropecé con uno de los juguetes de mi hermana menor, Margaret. ¿Que hacían sus juguetes en la cocina? No lo sabía, pero la cosa es que me tropecé y la harina salió volando por los aires. ¿A donde había llegado a caer? Sí, la bolsa se abrió en los aires...manchándonos tanto a Damon y a mi de una fina capa blanca. Me quedé atontada, sin saber que hacer o decirle.

Seguí a Elena con la mirada, había termiando de poner el queso y todas esas cosas dentro del pirex, confió en Elena, seguramente la lasagna saldría rica, como dije antes, confío en ella. Se dirigió hacia el horno y metió la lasagna dentro de esta para poder cocerla o yo que sé, luego regresó para coger la harina y llevarla al frigorífico, en eso tropesó, con ... con ... con uno de los juguetes de Maggie, que hacía esos juguetes ahí? la cosa es que la harina salió bolando y nos cubrió con una ligera capa de harina. quedamos mas blancos de lo que éramos.

Te ves muy bien - dije con una leve sonrisa mientras me quitaba la harina del rostro.

Me sonrojé por la verguenza de que hubiese pasado esto. Y mucho mas tras escuchar su comentario. Recogí el juguete de Margaret colocandolo en la mesa para que nadie mas se tropezase con el, y saqué de unos cajones unos paños. Me limpié el rostro, quitando la harina que me hacía ver mucho mas palida de lo que ya era.

Me acerqué a Damon y limpié su rostro con el paño, tratando de quitarle la harina que le había tirado de casualidad, pero había sido mi culpa. -Lo siento-dije en voz baja.No sabía que mas decir.

Elena se movió y se agachó para recoger el juguete de Maggie, seguramente para que nadie mas se manchara de harina, eso nadie quiere. Fue en busca de un trapo y se limpio - pálida, no pálida, igual te verás linda Elena - dije con una sonrisa, esperaba que no lo tomase a mal.

Se acercó a mí y me empezó a limpiar la cara - esta bien, esto se limpia ... - dije con una sonrisa mientras cogía el trapo y le llevaba a otra parte - y bien - me volteé - que hacemos mientras la... ehh.. lasagna este? - pregunté acercándome mas a ella.

Escuché su elogio, si así se podría decir pero lo único que logró con eso era que mis mejillas se tornacen de un color más rojo y brillante. Terminé de limpiar el resto que se había caido y dejé el trapo que había usado en la basura (despues de todo eran desechables) y fáciles de lavar.

Miré el horno y luego el marcador-Pues...faltan 45 minutos-dije alzándome de hombros y girándome hacia el-¿Que quieres hacer?-le pregunté sin obviamente darme cuenta de la cercanía en la que se encontraba de mi-Um..vamos a la sala?-dije sin más. Allí podríamos ver que podriamos a hacer para matar el tiempo.

Supuse que ese sería el tiempo por el cual debía esperar, así que solté un pequeño suspiro - esta bien - dije moviendome un poco mas a ella - pues ... - dije aun notando sus ojos y sus mejillas que se habían tornado de un rosa brillante, seguramente iba por un buen paso ... Escuché su sugerencia sobre la sala - ahí es donde iremos - dije alejandome un poco mas de ella para dirigirme a la sala.

En la sala, divisé el mueble y me senté a la espera de que Elena se sentra junto a mí.

La lasagna normalmente se podría cocinar en una hora a fuego lento en el horno, pero como le había aumentado un poco más se haria en 45 minutos. Esperaba que tia Jenna llegase temprano con Margaret de las clases de ballet, aunque a lo mejor ambas se iban a visitar a alguna amiga de Jenna o que se yo, era lo que muchas veces hacían.

Estaba cansada, por lo que no me quedaría parada. Sin embargo, el unico lugar que encontré para tomar asiento fue a un lado de Damon, y así lo hice mientras miraba fijamente los portarretratos y las fotos sobre la mesa del centro. Una de Jeremy con seis años cuando regresabamos de las vacaciones, otra de los tres en la playa y otra de Margaret el año pasado. En todas las fotos aparecian nuestros padres. Me quedé pensativa y luego observé a Damon. -Hum...¿Quieres hacer algo? Conversar...no sé-dije.

Creo que la apuesta iba en buen camino ... quien sabe, tal vez me terminaría besando, no sé, solo una suposición, pero si me quedaba con Elena, Stefan con quien se quedaría, con ... emm, no sé, quien sabe, tal vez en un siglo después encontraría a una tercera Katherine.

Después de haberme sentado, Elena se sentó a mi lado, preguntándome en que podríamos conversar, sabía que había estado mirando las fotos que se encontraban en la mesa de centro - y pues, como va Jeremy, Maggie, Jenna? - no sé, simplemente pregunté con una sonrisa que tal vez transmitiría un poco de preocupación.

-No pienses que creeré en eso...sé que te interesa en lo más mínimo-dije en voz baja, observándole. ¿Cómo sabía si es que en esos momentos no estaba tratando de controlarme? Conocía perfectamente a Damon, y sabía de un millón de cosas que era capaz de hacer. Me encogí de hombros subiendo los pies al sofá y pegando mis piernas dobladas a mi pecho, de modo que pudiese abrazarlas.

-Yo...uhm no lo sé-dije en un suave murmuro-Maggie ya va a empezar la escuela, Jeremy está..no se cómo está ultimamente mi hermano menor, pero algo pasa. Jenna anda involucrada en unos asuntos con Alaric, y no sé si ya está al tanto de lo que pasa en Mystic Falls. Me preocupan, son mi familia...y no soportaría ver sufrir a ninguno de los tres. "Y también me preocupan ustedes dos" iba a decir, refiriendome a Stefan y a él, pero decidí quedarme callada.

Le miré como se acomodoba, poniendo sus piernas para poder abrazarlas, si ensuciaba el sofá, no era mi culpa ...

Alzé una ceja al escucharla, realmente me sorprendio - ohh, ya veo - dije con una sonrisa realmente muy fingida. - tu has estado bien? - pregunté veía que los temas se agotaban...

Acomodada en el sofá abrazando mis piernas, podía observar perfectamente a Damon. -Yo...he estado bien, supongo-dije ladeando la cabeza suavemente. Tenía unos cuantos días sin haber visto a Stefan, pero el me había dicho que no me preocupase.

-Sé sincera conmigo Damon...-murmuré moviendo mi cabeza de un lado a otro-A qué haz venido?-pregunté mirandole a los ojos...aquellos ojos azules tan profundos...

Observaba cada cosa que ella hacía, tan delicada ella, su peculiar parecido en físico a Katherine, y Diablos! tan diferente a ella internamente.

- Te diré la verdad ... - dije pausadamente - he venido por algo que ... que, he hecho algo con Stefan ... - volteé la cabeza para no mirarla a los ojos, me tentaba tanto aquel collar que colgaba en su cuello, quitarcelo y despues el resto era historia, pero eso estaba "prohibido".

No creí que con pedirle que me dijiese la verdad lo iba a conseguir...pero al parecer sí, lo iba a ser. No sabía que creer de Damon, pero el era malo o despiadado, más no era mentiroso.

-Qué..has hecho con Stefan?-murmuré seria, sin quitarle la mirada de encima. También observé como movia su cabeza hacia un lado para no mirarme, lo que hizo que me levantase del sofá y me parase frente a el-Dímelo...qué estan tramando?-pregunté confundida. Me parecía extraño que ambos estuviesen en algo.-Y qué tiene que ver tu visita con ello?-estaba llena de preguntas, como era obvio.

La miré directamente, era inevitable - Stefan y yo ... te hemos apostado, puesto como un trofeo entiendes? - dije con una ladeo de labios y cabeza (? O_O - si me besabas serías mía, pero si lo llegas a hacer quiero que sea de forma ... sin eso - dije mirando el collar - quiero que sea de verdad y no por mí, es decir ... ya me entiendes - me paré del sofá y la miré a los ojos directamente, me fui apegando mas a ella con una sonrisa ladeada que significaba muchas cosas - ...- me acerqué a ella y le dí un leve beso en sus labios esperando a que Elena respondiera a lo que estaba pasando.